Soy María Virginia, nací y vivo en Buenos Aires, Argentina, hace 50 años y soy la creadora de V.
Hace unos años, en el camino de una profunda transformación, sentí la necesidad de comenzar a vivir una vida conectada a la belleza de lo imperfecto, la aceptación de los ciclos naturales de la vida, una vida más auténtica y natural, que implicó una nueva mirada hacia todo.
La práctica diaria del yoga, la meditación, el estudio de la metafísica, la alimentación consciente, natural y saludable, el respeto a su cuerpo como templo de mi ser y a la naturaleza, el cultivo de la vida espiritual y el autoconocimiento trajeron cambios que implicaron que mi trabajo como abogada fuese un traje que ya no me quedaba cómodo, así como ciertas formas de vestir y de relacionarse con el entorno, entre otras aspectos que fueron transformándose al ritmo de su cambio interior.
Apasionada por el arte en todas sus expresiones, fui involucrándose en el mundo del diseño de interiores donde dio sus primeros pasos paralelamente a ejercer su profesión de abogada, como una forma de expresarse.
Ese nuevo camino llevaría a convertirse en curadora de casas de decoración y ropa de diseño, trabajando con talentosos diseñadores y emprendedores, hasta dedicarse full time a crear su propia marca, cuando tuvo la certeza que era su verdadera vocación.
La identidad de la marca fue construida a partir de esa transmutación en mi vida junto con la búsqueda de volver a vestir resaltando mi esencia, libre de tendencias y modas pasajeras, natural y autentica, revalorando los materiales nobles y atemporales, la paleta de colores que me transmite calma y la conecta con la naturaleza, y honrando y resaltando el ADN latinoamericano, las geografías de su amado país y continente, sus campos, montañas y mares, la cultura de sus pueblos y su folklore.
La llame V. cuando en la nueva lista de mi palabras preferidas, estaba esa letra como protagonista…virtud, verdad, valor, volar, vestir, volver, visualizar, viajar, verano, vibrar, vivir, voluntad, valentía entre muchas otras, y representa también mi nombre, ya que es mi personalidad el sello en cada una de las prendas de V.
En la búsqueda del nombre para mi marca, hay un momento muy lindo que describe cómo nació V. : "uno de mis tres hijos me dijo: las palabras más lindas comienzan con V, y no lo dude! Se llamaría V".
Descubrí así que ese camino de transformación la llevó a practicar sin darse cuenta, el wabisabi, una filosofía japonesa que descubrí en un viaje a Japón cuando tenía 23 años, que se trata de representar todas esas cosas que huyen de lo artificial y manufacturado en serie.
Esta filosofía japonesa, y la propia de V. , cultiva la aceptación del continuo cambio del ciclo de la vida, del paso del tiempo y cómo nos afecta a nosotros y a las cosas que nos rodean.
"V. Ropa Con V. ALOR" pretende invitar a nuestros clientes a valorar su naturalidad y autenticidad y resaltar con sus prendas, aceptando la imperfección de la belleza, en ellos mismos, y en cada una de las prendas que abracen su cuerpo. Nuestra colección está integrada por vestidos, kimonos, blusas y tops en géneros nobles como el lino, gasas rústicas, tussores y un lienzo fabricado por nosotros y ponchos, túnicas, ruanas y bufandones en lanas de llama y oveja e hilos de algodón confeccionas en telares y accesorios en cuero argentino genuino y en chaguar.
Cada prenda está elaborada cuidadosamente de manera artesanal como una pieza de arte única.
En este propósito firme de ser feliz en en trabajo y sentir coherencia entre en filosofía de vida y mi marca, soy consecuente en cada paso que doy , eligiendo no solo por su capacidad a las personas que forman parte del equipo detrás de V., sino sobretodo por su energía y su compromiso con nuestros valores y propósito.
Es por ello que nuestro slogan es “Ropa con Valor”.
Crear esta marca fue parte de lo que quiero que mis hijos tengan como legado y filosofía de vida: escuchar sus deseos y sueños, confiar en ellos y vivir y trabajar cada día con virtud. Y que sobretodo valoren la belleza de lo imperfecto, y practiquen la atemporalidad, trascendiendo el tiempo, no solo en su forma de vestir, libre de modas, respetando su personalidad, sino también para vivir sabiendo que no hay fechas ni edades para nuevos comienzos y debemos animarnos cada vez que “el traje ya no nos quede cómodo”.
Soy V. 🕊️